domingo, 6 de noviembre de 2011

Y porque seguimos aqui?

Empiezo diciendo que este blog no tiene nada que ver con poesia ni mucho menos con Tennesse Williams, no tiene pretenciones especiales, no busca enseñar, pero si compartir historias propias y ajenas de dos y cuatro patas.

Cuando empezamos nuestra vida profesional nos llenamos de una gran dosis de mistica y el deseo de cambiar el mundo... despues de algunos años puedes perder la mistica y darte cuenta que el mundo lentamente te cambió; ya no interesan los principios ni los medios y lentamente vas adaptandote a que las cosas "son como son".  Cuando te das cuenta te hallas aceptando ante otros que si pudieras volver al pasado y decidir no hubieras escogido lo que estudiaste.....  Esto me confeso una colega hace poco tiempo... no dije nada, la entiendo, esta cansada y perdió la fé, y el gusto por lo que hace.  Comprendo que "el amor no basta", pero sin ese amor por lo que se hace uno no puede seguir...  Y la ausencia de amor y el exceso de deudas acaban con cualquier relacion: y es que la medicina veterinaria es una cuestión de amor. 

Muchas veces en mi trabajo he terminado preguntandome porque escogi lo que hago y no me dedique a otra cosa: economicamente, da para vivir decentemente, pero no para hacerse millonario (los que pudieron hacerlo, fabuloso).  A veces, cuando las cosas no te salen bien, cuando un paciente que luchaste por varios dias al final muere, cuando te las tienes que ver con un propietario abusivo que te hace odiar la humanidad, cuando tienes que soportar un jefe insoportable...  quieres mandar todo a la m... (incluido tu jefe)... pero siempre esta ese cachorrito que te mueve la cola y que te mira desde el fondo de unos ojos oscuros y alegres, y te hace recordar que tu puedes ser la única diferencia para él entre vivir arrumado en el patio de una casa o ser ese personaje que acompaña y comparte con la familia.

Cuando ves esos desgraciados que tratan los animales como mercancias, y peor que cosas desechables y te dan ganas de romperles la madre, es que sabes que debes seguir.  Cuando ves un perro, que con una pata rota y heridas abiertas sigue moviendote la cola y lamiendote la mano a pesar de que su dolor puede ser insoportable, sabes que tienes motivos de sobra para seguir...  cuando tienes que acompañar (porque no puedes hacer nada más) a un corajudo peludo, que se esta muriendo, y al final debes sacrificarlo, sabes, en el fondo de la tristeza, que es un motivo más para seguir... 

Porque al final del día te queda la satisfacción del deber cumplido... no importa si fue rentable (y si lo fué, mejor),  y sabes que ayudaste a cambiar la vida de alguien (humano o animal), sabes que con tus acciones tocaste la vida de algunas personas y solo esperas que hayas podido cambiar un poquito el mundo.